Desde LGratis se pretende mantener una postura flexible en la mayoría de circunstancias. En el ámbito de la inteligencia artificial, siendo una tecnología que ha llegado para quedarse, se mantiene esa flexibilidad. Debemos recordar que en algún momento hay aceptar la irrupción de alguna nueva tecnología, ya que es algo inevitable que ocurre a lo largo del tiempo: la imprenta, la máquina de escribir, los ordenadores personales con procesadores de texto que incluyen corrección ortográfica automática... todos estos son ejemplos de estos cambios que ya han sido aceptados.
Dada la flexibilidad al uso de nuevas tecnologías, LGratis fue el primer medio en incluir información sobre el uso de IA en los artículos. Sin embargo, existen circunstancias en la que no existe flexibilidad posible. Una de ellas es en el caso de los engaños, y existen muchos en el uso de la inteligencia artificial: multitud de falsos autores mandan a IAs a escribir libros y luego estampan su firma en ellos, como si fuesen propios, para venderlos al mismo precio que los autores reales.
Al margen de la falta de ética de este engaño, la calidad de estos textos todavía es muy pobre en comparación con la de autores reales. Repeticiones excesivas, exceso de tópicos, copias casi calcadas de fragmentos de otros textos, incongruencias, etc. son solo algunos ejemplos de la ausencia de calidad literaria en los textos generados con IA. Además, estos falsos autores, generalmente, no se conforman con producir libros automáticamente al mismo ritmo que haría un escritor real, sino que son capaces de publicar, literalmente, cientos de libros al mes, haciendo que algunas editoriales hayan decidido dejar de aceptar manuscritos ante tal avalancha.
En LGratis se promueve la lectura, desincentivando la piratería y promocionando a autores nuevos o poco conocidos. Por esto, se ofrecen multitud de libros gratuitos, siempre legales, con los que los lectores pueden dedicarse a su afición de leer sin perjudicar a los autores. Pero a la hora de promocionar autores siempre nos referimos a autores reales, no a las personas que emplean la IA como medio de producir libros en masa. Por esto, desde nuestros comienzos, nos propusimos un objetivo que estamos cumpliendo: ofrecer libros de calidad y ser transparentes con el uso de la inteligencia artificial.
LGratis dispone de un sistema de baneo de autores que permite recoger los diversos motivos por los que pueden ser excluídos de nuestras listas de libros. Actualmente, la lista de autores excluidos supera los cien, y casi todos han sido baneados por usar inteligencia artificial sin informar de ello al lector. Excepcionalmente, hemos permitido la aparición de algún libro creado con IA, pero tan solo porque la temática era interesante y porque su creador explícitamente aclaraba en el libro que estaba escrito con inteligencia artificial. Al menos, cuando un creador de contenidos indica de forma clara que usa IA, está permitiendo al lector decidir si quiere o no comprar ese material y, por tanto, no hay engaño. Sin embargo, el uso de inteligencia artificial en textos haciéndolos pasar por creaciones humanas es un engaño intolerable.
Por fortuna para los lectores, la detección de libros creados mediante inteligencia artificial es sencilla. En un primer vistazo, una portada con aspecto excesivamente suave, sin el granulado habitual de cualquier fotografía, ya está indicando que podría estar generada con IA y, por tanto, podemos sospechar que su contenido también lo esté. Además, al producir la IA textos de escasa calidad, las puntuaciones de los usuarios suelen ser bajas, no superando en la mayoría de casos una nota de cinco sobre diez. Si, además, la sinopsis está plagada de tópicos, ya casi podemos estar seguros de que el libro es una creación de inteligencia artificial.
Pero esto no es suficiente para asegurar que el libro esté generado con IA. Por ello, LGratis utiliza un método infalible para asegurarse de no publicar libros artificiales. Las personas que crean libros con IA suelen abusar y crearlos en una cantidad imposible para un humano real. Así, hay casos de personas que utilizan la IA para crear, literalmente, cientos de libros al mes. Incluso las hay que son capaces de crear decenas de ellos en un mismo día. LGratis busca toda la creación literaria de la persona en cuestión, la ordena por fecha de publicación y, cuando publica libros con una frecuencia imposible, banea a esa persona para que no aparezcan más sus libros junto con los de autores reales. Este se trata de un método sencillo y eficaz de evitar que seamos engañados haciéndonos pasar libros artificiales por libros creados por humanos.
Sin embargo, no todas las personas baneadas son falsos autores. Algunos son autores auténticos, pero sus creaciones no son apropiadas o su comportamiento va en contra del apoyo a los autores. Así, nos hemos encontrado casos de autores que solo escriben libros románticos en los que asocian una y otra vez el romanticismo femenino con las ansias de riqueza o poder. De esta forma, los autores que producen libros donde se denigra a la mujer, o donde se denigran a colectivos, se expresan opiniones que solo crean perjuicios o con contenidos políticos extremos, son también descartados.
En LGratis se promocionan escritores, por tanto, otro caso de autores baneados son los que son contrarios a la promoción de escritores. Así, en la lista de baneo, también está el caso de una escritora que, tras una cuenta falsa de Amazon, se dedica a crear reseñas maliciosas a otros autores de temáticas similares a la suya. Por fortuna para la comunidad de escritores, este es el caso más minoritario de autores baneados en LGratis.
Aunque disponer de una lista de autores baneados con más de cien resulta, cuanto menos, inquietante, también es una forma de asegurar la calidad literaria. LGratis va a seguir avanzando, e incluso sumando otras formas de detección, para encontrar a estos falsos autores y descartarlos para ofrecer siempre a los lectores los contenidos de la máxima calidad. Así, también seguirá promocionando a los escritores auténticos y honestos que merecen todo nuestro apoyo.